Ahora que se avecina el frío, el horno se convierte en uno de los lugares favoritos para cocinar (hay pocas cosas mejores que abrir el horno y a la vez que hueles algo delicioso, notas el calorcito). Aquí os proponemos una receta tan sencilla que ya no hay excusas para no usarlo …
|
|
Ingredientes (para 4 personas)
| Preparación
|
- 1 paquete de hojaldre
- 1 solomillo de cerdo de unos 500g (los venden ya envasados al vacío).
- 250g de queso gorgonzola (una cuña).
- 1 yema de huevo
| - Cortamos el hojaldre refrigerado en trozos. Ten en cuenta que tienen que caber dentro los trozos de solomillo, así que tienen que ser algo grandes.
- Cortamos los solomillos en trozos de un grosor de unos tres dedos. Salpimentamos y los sellamos en una sartén.
- Una vez sellados los colocamos encima de los trozos de hojaldre, y ponemos un trozo de queso gorgonzola encima (ten en cuenta que es un queso fuerte, así que hay que echar con moderación).
- Cerramos el hojaldre como si fueran saquetes, los pintamos con yema de huevo y los metemos en el horno a 200º durante unos 25 min.
|
|
Truco
|
| Aquí el truco es controlar que el hojaldre se haga lo justo. Si lo dejas demasiado corres el riesgo de que se seque. Vigílalo cual águila culebrera para obtener los mejores resultados. Otra opción de presentación es hacer el solomillo entero a la sarten, y hacer un rollo con el hojaldre, partiéndolo luego a rodajas … |
|
